1 Me encanta nadar en el mar. Creo que es divertido sentir la arena húmeda deslizándose entre los dedos de mis pies. También creo que es divertido montar sobre las olas suaves. Una vez, cuando estaba nadando, vi una enorme aleta dorsal que se me acercaba. Eso no fue divertido. ¡Fue espeluznante! Tenía miedo de estar nadando junto a un tiburón. Fui hacia la playa tan rápido como pude. Afortunadamente, esa escalofriante aleta trasera no era de un tiburón. Era de un delfín.
2 Los delfines son hermosos animales acuáticos. Hay casi cuarenta tipos diferentes de delfines. Estos animales impresionantes nadan fácilmente en el agua. Usan las aletas de los costados para timonear. La mayoría tiene aletas dorsales, que usan para algo más que asustar a los turistas que están nadando. Están diseñadas para ayudar al delfín a mantener el equilibrio.
3 Los delfines son mamíferos. Tienen sangre caliente como nosotros. Como los humanos, también tienen una columna vertebral y las hembras tienen bebés vivos que se llaman crías. La madre delfín alimenta a las crías con leche que sale de su cuerpo. Los delfines tienen piel suave que parece de goma. ¡Algunos dicen que al tocarlos se siente como un perro caliente!
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